jueves, 19 de junio de 2008

He aprendido

* He aprendido....Que una sonrisa es la mejor llave
* He aprendido....Que no hay abrigo mayor que el abrazo de un amigo
* He aprendido....Que no gana el que mas grita, sino el que puede mirar atrás, sin sentir miedo
* He aprendido....Que no hay mayor lastre que la amargura
* He aprendido....Que las trabas no existen en el camino solo en nuestra cabeza
* He aprendido....Que nunca debo decir que no puedo sin haberlo intentado
* He aprendido....Que las lágrimas de los ojos, no son muestras de flaqueza, sino de un corazón que escucha
* He aprendido....Que tengo dos oídos, dos ojos y una boca
* He aprendido....Que no hay guerra que merezca que alguien no vuelva
* He aprendido....Que no hay fortaleza mayor que tu hogar
* He aprendido....Que tus ojos guían mi camino
* He aprendido....Que de la mano, nadie nos puede parar
* He aprendido....Que cuando los míos son felices yo soy feliz
* He aprendido....Que la mejor escuela es escuchar al anciano
* He aprendido....Que nunca lo sabré todo
* He aprendido....Que no estamos solos
* He aprendido....Que decir te quiero, a una madre, a un padre o aun ser querido, siempre es el mejor regalo
* He aprendido....Que por difícil que sea decir perdón, siempre vale la pena, aunque más pena vale evitar tener que decirlo
* He aprendido....Que creo en ti.
* He aprendido....Que la vida dura mientras tengamos cosas de escribir en ella.
* He aprendido....Que los pequeños pasos de cada día hacen que este sea espectacular.
* He aprendido....Que toda persona espera algo de alguien, pero que prefiere lo que se da, sin pedir recompensa alguna.
* He aprendido....Que negar la realidad no cambia la realidad.
* He aprendido....Que amar y odiar, requiere que pensemos en una persona y que para lo segundo no merece la pena, así que no odiemos a nadie, no se lo merece.
* He aprendido....Que el amor y no el tiempo cierra todas las heridas.
* He aprendido....Que tengo mucho que aprender de todo y todos.

* He aprendido....Que todos con los que te encuentras se merecen que los recibas con una sonrisa.
* He aprendido....Que prefiero hacer cosas y ver el tiempo que me queda, a perder el tiempo en ver cuanto tiempo me queda.







¿y tú? ¿que has aprendido?

lunes, 19 de mayo de 2008

Un sueño hecho realidad

Una sonrisa florece en mi rostro,
el recuerdo de miles de noches
embriaga mi alma,
y todo,
todo……………
te lo debo a ti.

Hemos construido un muro de ilusiones,
con el sudor de nuestro esfuerzo
ahondamos la tierra yerma,
sobre ella depositamos abrazos y caricias,
y los días hicieron el resto.

El tiempo intento sellar nuestros labios,
luchamos contra la monotonía,
la guerra fue fácil,
tú el escudo, yo la espada
tu la espada y yo ………
yo ……….. Tú fiel escudero

Cada día que me has hecho feliz
coloque una estrella en el cielo,
fiel testigo de mi dicha
y para no olvidar que mis días
son los latidos de tu corazón.

Quiero que el silencio de los corazones nunca exista,
Quiero gritar con mis manos lo que mis labios no digan,
Quiero despertar a tu lado con la luz de tu vida,
Te Quiero…………….. a ti

lunes, 7 de abril de 2008

Molongo el Mod

Esta es la historia de uno de los nombres mas famosos de esta Federacion. Muchos hemos contado aqui el origen de nuestros nicks, pero nunca nadie explico que se escondia detras del nombre de Aquel a Quien Nunca Debemos Nombrar, de aquella palabra cuya sola mencion hace que se nos ericen los pelos de la nuca, se nos ponga la carne de gallina y se nos cierre automaticamente el tapon del culo... Esta es la verdadera historia del origen de MOLONGO... Remontemonos en el tiempo. Hace algunos años, en un lugar perdido en medio del Mediterraneo cercano a las costas italianas. Una patera proveniente de Africa flotaba entre las agitadas aguas, sin aparentes signos de vida en su interior. De repente, una luz corta la oscuridad de la noche: es una patrullera de los Guardacostas italianos, que busca supervivientes de la ultima oleada de inmigrantes que esta llegando a sus costas. Por unos momentos, parece que el foco de luz va a centrarse en la fragil embarcacion, pero pasa de largo a su lado y la esperanza de los ocupantes de la patera se desvanece junto con la estela de la fragata...

Unas horas mas tarde, en una playa siciliana, unos paseantes que disfrutaban del sol del amanecer encuentran los restos del naufragio de la patera. A simple vista, parecia que no hay ningun superviviente del desastre, pero en cualquier caso avisaron a los servicios de emergencia. Mientras los esperaban, comenzaron a oir un ruido extraño que provenia de la barca, como si alguien susurrara pidiendo auxilio. Justo cuando llegaban las ambulancias y los carabinieri, vieron que debajo de unas mantas andrajosas, habia un niño, de unos 4 años, flaco y malnutrido, pero sano, que extendia sus manitas hacia ellos... Habia vida en medio de la desgracia.

Ya en el hospital, los medicos empezaron a examinar al niño. No presentaba sintomas de enfermedad a primera vista y decidieron hacerle analisis mas a fondo. De repente, al desnudarlo para ponerle un pijamita, la tela que tapaba su entrepierna se descorrio... y desvelo el secreto que escondia el chaval. Atonitos, los medicos balbucearon, incapaces de pronunciar palabra. Las enfermeras, con los ojos como platos, se llevaban las manos a la boca. Nadie rompio el silencio hasta que un medico acerto a exclamar: "Mamma mia, che cazzo!". En medio del estupor, una enfermera solicita se acerco al niño, le tapo con una manta, protegiendole de las miradas ajenas, y cariñosamente le susurro al oido: "Caro bambino, e molto longo...". El niño reacciono ante este gesto amoroso y, mirandola, acerto a responder, repitiendo las palabras de su benefactora: "mol....to...longo..."

Durante las siguientes semanas, el niño se convirtio en la mascota del Hospital, llenando de alegria las salas de espera mientras corria repitiendo las unicas palabras que parecia conocer: "Mol-longo, Mol-longo". Como no sabia decir nada mas, repetia lo mismo cuando los pacientes y los que no conocia le preguntaban su nombre: se señalaba a si mismo y decia "Molongo!". Y con ese nombre empezaron a conocerle...

De lo que paso en posteriores años (su huida de Sicilia perseguido por la Mafia por "desvirgar" accidentalmente a un Capo mientras perseguia con su lanza a su hija; la llegada a las costas españolas en una embarcacion cuyo timon era lo que ya conocemos todos; la entrada en el Geriatrico, adoptado por las enfermeras que se sintieron emocionadas al ver su juventud y su... garbo, etc...) hasta llegar a nuestros dias es otra historia, que sera contada en su debido momento por otro abuelo cuya memoria sea mejor que la mia...


By Fronchy

viernes, 14 de marzo de 2008

Toma una sonrisa,
regálala a quien nunca la ha tenido.

Toma un rayo de sol,
hazlo volar allá en donde reina la noche.

Descubre una fuente,
haz bañar a quien vive en el barro.

Toma una lágrima,
ponla en el rostro de quien nunca ha llorado.

Toma la valentía,
ponla en el ánimo de quien no sabe luchar.

Descubre la vida,
nárrala a quien no sabe entenderla.

Toma la esperanza,
y vive en su luz.

Toma la bondad,
y dónala a quien no sabe donar.

Descubre el "amor",
y hazlo conocer al mundo.

jueves, 28 de febrero de 2008

Aerolínea 69

Hoy durante la comida hemos tenido una idea innovadora así que no quiero dejar pasar la oportunidad para dejar constancia de la misma en este nuestro blog y así gozar de unos posibles futuros derechos por la patente.

Hemos estado hablando sobre la creación de una nueva aerolínea que permitiera cumplir con uno de los mitos eróticos-festivos de la ciudadanía, que no es otro que tener sexo en un avión, la Aerolínea 69.

Hace poco ha salido una compañía de bajo coste que iba a sacar vuelos con camas Londres – Nueva York en el nuevo A380 y esto nos ha dado la idea porque a su vez esta compañía de Singapur solicita a sus pasajeros la abstención a practicar el sexo.

He aquí nuestra idea en la que proponemos que la Aerolínea 69 tenga vuelos de fines de semana, saliendo el viernes y volviendo el domingo de manera que una cariñosa pareja pueda pasar un fin de semana romántico en las ciudades más exóticas, románticas y apetecibles de Europa. Así podríamos tener vuelos de Madrid o Barcelona a ciudades como: París, Venecia, Roma, Ámsterdam, Londres, Bruselas, Berlín, Praga, Atenas, Málaga o Teruel. Son solo unos ejemplos, pero habría que ver la demanda que tiene cada ciudad para ampliar o reducir ciudades.

De este modo, el paquete erótico-turístico incluiría no solo un viaje en avión con tu suite particular, de las cuales algunas estarían decoradas temáticamente (entiéndase romano, griego, edad media, prehistoria, oficina, colegial, …) en la que disfrutar de un especial en el que poner una muesca a una de tus fantasías sexuales sino también una estancia en un buen hotel con una visita de fin de semana a los lugares más románticos y rincones más sensuales de la ciudad que se desee visitar.

Hemos eliminado la posibilidad de vuelos transoceánicos en un principio porque no se podría hacer en fin de semana, pero si la propuesta tiene es exitosa, se podría ampliar la oferta a lunas de miel, semanita de despedida pre-embarazo, bodas de plata o simplemente por gusto.

Como esto es solo una idea consecuencia de un ameno almuerzo de desconexión del trabajo y dado que no se dispone del capital ni de las infraestructuras, esta idea queda totalmente abierta a vuestras aportaciones y críticas, constructivas o no con las que enriquecer esta nuestra propuesta.

Os emplazo a dejar vuestra opinión en este blog.


Ciao !

miércoles, 27 de febrero de 2008

Ogrish canta, los staffosos bailan

Aquí podemos ver a Ogrish en un tono desenfadado delante de las cámaras cantando y bailando mientras le acompañan en la coreografía vic, ivantxo, poti y vicio.

martes, 26 de febrero de 2008

La muñeca hinchable

Finalmente, Juanin se ha sincerado, aunque a Jymenin le sigue faltando un complemento a la confesión.

lunes, 18 de febrero de 2008

Te quiero hermanita :_)

Va por tí Ivi :)

Días, semanas, meses e incluso años pasarán,
y verte otra vez es como volver a amanecer.
Ciudades, países y oceános nos separarán,
mas contigo el mundo entero voy a recorrer.

Porque no importa la distancia,
Porque no importa el tiempo.
Contigo vuelvo a nuestra infancia
y vivimos en un auténtico cuento.

Un cuento de hadas y de castillos,
de grandes héroes y malvadas brujas.
Un cuento que nos sabemos al dedillo
pues representa esa nuestra burbuja.

Ahí donde sólo contamos nosotros,
donde nuestra amistad es lo único,
donde contamos el uno con el otro
y el resto del mundo sólo es públcio.

Nuestra amistad, que traspasa fronteras,
que perdura en el tiempo, que sobrevive,
esa que llega más allá de las estrellas.
Gran tesoro que en mi corazón existe.

Brasil - Capítulo 2

Capítulo 2 – Días tranquilos en São Paulo y el viaje a Rio (primera parte)

Bueno, después de ese primer fin de semana de lujuria (aunque no plasmada en la realidad) y desenfreno, se dio paso a un par de días más tranquilos de los que tampoco tengo mucho que contar.

El lunes por la mañana, mientras Ivi y Moana se iban a trabajar, yo me quedé durmiendo (recuperando alguna hora de sueño del fin de semana) hasta que no aguanté más tirado en la cama y me fui al puf a ver un rato la tele. Por la tarde fuimos a un centro comercial cercano a ver si me compraba alguna cosilla de verano pues apenas me había llevado alguna camiseta y un bañador, en cualquier caso iba con la idea de comprar algo allí pues Ivi me había dicho que era baratísimo y doy fe de que tenía razón. Después de eso, me llevó a probar el pão de queijo, que es un panecillo de queso (como su nombre indica) que está demasiado bueno…Para que os hagáis a la idea, desde ese día no hubo un solo día de mi estancia en Brasil que no me tomara por lo menos uno. Y tras el paseo por el centro comercial (uno de los dos más pequeños de São Paulo y ya era más grande que la mayoría de España) y el pão de queijo con su correspondiente zumo de maracuyá, volvimos a casa, estuvimos un buen rato charlando, cenamos y a la camita, a seguir hablando (yo dormía en la litera de arriba e Ivi en la de abajo).

Al día siguiente, se repitió la rutina mañanera, pero un poco más corta puesto que como a la 1 de la tarde habíamos quedado con Moana y Rubens en ir a comer pastel a una feria que estaba al lado de casa de Ivi. Y cuando digo pastel no me refiero al pastel en el que todos estáis pensando, si no en un “plato” típico brasileño; y cuando digo feria, tampoco es la típica feria, si no un minimercadillo de comida con puestos en los que, además de vender alimentos, puedes comer; y cuando digo plato, tampoco es que sea un plato per se, si no lo que podéis ver en una de las fotos (http://www.facebook.com/photo.php?pid=895110&l=9dfd1&id=706911000). Es una especie de empanada rellena de casi lo que quieras (pollo, quesos, camarones, carne, verduras…) que van preparando ahí mismo en el puestecillo en la calle en unas freidoras inmensas. El caso es que estaban buenísimas y apenas costaban $R3.5, un regalo. Y bueno, como tampoco era cuestión de estar a palo seco, compramos un par de botellas de caldo de caña para acompañar la comida. Un auténtico manjar callejero que, si podéis probar alguna vez, no podéis dejarlo pasar. Después del atracón (porque llenan los condenados pasteles) nos fuimos a otro centro comercial que hay en la Avenida Paulista porque quería comprar un par de vaqueros y me dijo Ivi que ahí eran buenos y baratos (es donde compraba ella). Nos encontramos con Amanda (la borracha que se me echó al cuello) y fuimos a la tienda de la que hablaba Ivi. Era pequeñita como ella sola, apenas unos 20 metros cuadrados, pero no veáis que dependientas…Jóvenes, pequeñitas, monas y súper simpáticas, tanto que casi entraban al probador contigo (lástima que no lo hicieran xD) para ver si te sentaba bien la ropa, si te estaba cómoda, etc. En fin, que después de un buen rato más pendiente de ellas que de los vaqueros, de contarles de mi viaje, cosas de España, etc. al final me compré un par y nos fuimos a tomar algo por ahí, pero no nos pudieron acompañar las dependientas L El caso es que nos fuimos a una especie de irlandés que había más o menos cerca del centro comercial y nos estuvimos Ivi, Moana y yo (Amanda se tuvo que ir a hacer la maleta porque al día siguiente se iba a Australia) un buen par de horitas tomando chopps de cerveza a palo seco por la falta de dinero (que era barato, pero no llevábamos casi nada xD). Habría que enseñarle al resto del mundo la buena costumbre que tenemos los españoles de acompañar las cervezas con algo de picar…

Tras esos dos días de calma y tranquilidad, llegó el miércoles 23 de enero, día en que nos marchábamos a Rio de Janeiro previo paso por la oficina. Después de un rato en el que Ivi andaba ocupada con alguna cosilla de trabajo y yo me entretenía en el ordenador, comimos y cogimos carretera. El día anterior Ivi me había mostrado la gasolinera donde solía parar a repostar antes de salir de viaje. El caso es que tras un rato de cháchara en el coche, veo como la pasamos de largo y se me ocurre mirar el indicador de la gasolina para descubrir que apenas le quedaban un par de litros antes de entrar en la reserva…y ya estábamos en la autopista, una autopista nuevecita nuevecita en la que apenas ha dado tiempo a poner alguna gasolinera cada muchos kilómetros, y claro, le pregunto a Ivi “¿dónde vamos a parar a repostar?”, a lo que me responde con un inocente “Donde te enseñé ayer”…Y claro, yo a cuadros. Cuando le digo que si no lo hemos pasado ya, se da cuenta del percal, pero según me dijo, no había manera de dar la vuelta, así que tendríamos que fiarnos de encontrar alguna gasolinera en el camino. Después de rodar más de 10 kilómetros con la reserva, finalmente encontramos un puesto de carretera, con su restaurante, su tiendecilla y su gasolinera. Menos mal, porque yo ya estaba al borde de un ataque de pánico a tener que ir por esas carreteras caminando en busca de una gasolinera fantasma…Que no es que tenga miedo por mi seguridad, es que ya me pasó una vez con mi hermana y mi cuñado en Madrid y no me gusta nada la sensación de buscar sin saber si voy a encontrar.

Pero bueno, después de ese pequeño trance, el resto del viaje fue como la seda, 5 horas de caminos preciosos, rodeados permanentemente de vegetación y paisajes espectaculares, hasta llegar a Rio de Janeiro cuando ya se estaba haciendo tarde. Además, estaba bastante nublado, por lo que las vistas no eran todo lo bonitas que podrían ser al estar ocultos totalmente el Cristo y parcialmente el Pão de Açúcar. Después de pasar por las bahías de Botafogo y Flamengo (¿a que os suenan estos nombres?), llegamos finalmente a casa de la abuela de Ivi, una señora de unos 85 años que vive con una de las hijas en una casa ubicada en uno de los mejores sitios de Rio (http://maps.google.com/maps?f=q&hl=en&geocode=&q=Rua+s%C3%A1+ferreira+204&sll=-22.981824,-43.194852&sspn=0.007023,0.010042&ie=UTF8&ll=-22.983049,-43.19129&spn=0.056181,0.080338&z=14&iwloc=addr). Como podéis ver, las playas de Ipanema (al Sur ) y de Copacabana (al Este) están equidistantes a 5 minutos a pie de la casa, aunque como curiosidad y si os fijáis bien, justo al Norte (en la acera de enfrente y señalado como una calle gris) se encuentran las escaleras que llevan a la Favela Morro do Cantagalo. Curiosamente, las relaciones de las favelas con sus vecinos del otro lado de la calle son ejemplares, nunca hay problemas y se llevan muy bien. De hecho, parece que lo único peligroso de las favelas es entrar sin ser de ahí, pero los alrededores no son para nada peligrosos (salvo que el alrededor en cuestión sea una zona de encuentro entre dos favelas que tengan sus rencillas). Es más, se está promoviendo el alojamiento de turistas en las favelas bajo la tutela de la propia gente de las favelas, que les hacen de guías turísticos por Rio y les cuidan como si fueran alguien de la familia, sin duda una iniciativa muy positiva para la gente de las favelas, aunque todavía en proceso de experimentación. Pero bueno, volviendo al viaje en sí, después de descargar el coche nos fuimos a dar un paseo por Copacabana, la playa más famosa del mundo junto a Ipanema. Podéis ver algunas fotos aquí: http://www.facebook.com/album.php?aid=39255&l=95201&id=706911000. De la 18 a la 22 corresponden a Copacabana, pudiendo verse una de las esculturas en arena que había (impresionantes los colores), el famosísimo Copacabana Palace (frente al que se hacen los conciertos como el Rock in Rio, de hecho, es curioso puesto que cuando hay conciertos se instala una pasarela que cruza la calle por encima y que va directamente desde la habitación de los artistas al escenario) y el fuerte militar que hay sobre el espigón y que hoy sirve de lugar para hacer ferias. Bueno, después del paseo por la playa volvimos a casa, a tirarnos en el sofá a hablar un rato con la tía de Ivi (increíble lo de esta señora, una trekkie en toda regla con sus tatuajes de Star Trek, su habitación llena de pósters y maquetas y, cómo no, la serie completa en DVD) antes de irnos a dormir.

A la mañana siguiente nos despertamos bastante pronto con la intención de ir al Pão de Açúcar cuando todavía no hubiera demasiada gente. Aparte de lo clásico de la postal de Rio con el Cristo y el Pão de Açúcar, el sitio es espectacular, pero aún mejor es lo que me contaba Ivi. Las fotos del álbum que se corresponden con este momento son las que van de la 23 a la 28. En primer lugar, he de contar que la zona en la que se asienta el Pão de Açúcar es una zona puramente militar (con sus cuarteles y sus residencias) conocida como Praia Vermelha por la playa junto a la que está ubicada. De ahí sale el teleférico con destino al Morro da Urca, que es el monte más pequeñito que se ve siempre junto al Pão de Açúcar. En su cima y en ocasiones especiales (como el año nuevo por ejemplo) tienen lugar fiestas y conciertos de distinto tipo, aunque normalmente son grupos o solistas brasileños los que tocan ahí. Tiene un anfiteatro en el que se hacen los conciertos y un par de “salas” habilitadas para bailar y relajarse (foto 27). Sin duda, tiene que ser espectacular acudir a una de estas fiestas o conciertos en un lugar así. En fin, desde el Morro da Urca sale un segundo teleférico que, esta vez sí, te lleva hasta el Pão de Açúcar (fotos 23 y 24). Desde ahí las vistas son impresionantes y la posibilidad de tomarte una cervecita con ese fondo es un auténtico privilegio. Normalmente y con un cielo despejado, la vista del Cristo es única también, pero desgraciadamente no tuvimos esas condiciones, así que tuvimos que conformarnos con verlo entre las nubes. Después de relajarnos un rato con las cervecitas, de deleitarnos con el paisaje (ante nuestros pies quedaban Copacabana (fotos 25 y 26), Praia Vermelha, Cara de Cão (que es donde vive Roberto Carlos), Flamengo y Botafogo) y de seguir dale que te pego a la sinhueso, descendimos nuevamente hasta Praia Vermelha, donde cogimos un caminito que iba pegado a la orilla del mar (que no playa) rodeado de una vegetación selvática híper exuberante para dar un paseíllo (foto 28).

Después de la excursión nos fuimos a pasar el resto de la mañana y parte de la tarde a Ipanema (fotos 29, 30 y 31), playa en la que se encuentran todos los brasileños de la zona, lo que contrasta con Copacabana, que es donde están todos los turistas. Al margen de la diferencia de especímenes, la playa es espectacular, arena blanca, fina y, sobre todo, limpia, impoluta. Es una gozada eso de ir por una playa y no encontrarte colillas ni latas por el suelo. Y bueno, otra cosa curiosa es que en Ipanema, en los puestos 6 y 7, es donde se concentra la mayor parte de la población gay de Rio…y si la gente de Rio ya de por si se dedica al culto al cuerpo, al deporte (no he visto más espacios para hacer deporte gratis en mi vida) y a la salud, no os podéis ni imaginar lo que son los gays…En cualquier caso, nosotros fuimos a esparcirnos cerca del puesto 9, una zona tranquila, pero con gente, por lo que no estábamos marginados. Cogimos nuestra sombrilla, nuestro coco y a tomar el sol…De vez en cuando pasaban los típicos muchachos con sus neveras de camping llenas de bebidas variadas (cervezas a $R2 y zumos naturales a $R1), otros con cocos, otros con chucherías y los últimos con unas empanaditas espectaculares por la friolera de $R0.50. Y eso en una de las dos playas más turísticas de todo Brasil…Desde luego, todo un lujazo, y así nos estuvimos hasta las 6 y media aproximadamente (y todo sea dicho, a pesar de que estuviera nublado, tostándonos de lo lindo). Pero después de darnos unos cuantos remojones, de ver a unos guiris pidiéndoles a una banda musical que les tocaran alguna canción del Ché, de mirar con ojos lujuriosos a todos los culos preciosos que paseaban por ahí, de mirar con envidia a la gente de los hoteles que se ponía en manos de esas masajistas en la misma playa, de seguir hablando de mil cosas con Ivi, de ponernos ciegos de zumos naturales, empanadas, agua de coco y cervezas, después de todo eso, nos fuimos a casa a quitarnos la arena, dejar las cosas de playa y poner rumbo a Maracaná para ver un partido del Campeonato Carioca (torneos de pretemporada regionales), más concretamente, un Flamengo vs Cardoso Moreira. El ambiente, para ser un partido entre un equipo venido a menos y un tercera división, era bastante majo, los ultras no dejaron de hacer ruido en todo el partido y el grupo de samba igual. Además, ver un partido en un estadio así es una de las obligaciones de todo amante del fútbol (siempre que se tenga la ocasión, claro, lo que es pecado es dejarla pasar), un estadio enorme, pero en el que se ve perfectamente el terreno de juego desde cualquier parte (a diferencia de estadios como el Bernabéu, donde no se ve nada a partir del segundo anfiteatro), en un ambiente estupendo y viendo un fútbol bastante más espectacular que el europeo. Además (y ahora me acuerdo del post de Neskatxo con respecto al viejo marcador de la Catedral), cada 2 minutos tenías al chico con las chucherías, los perritos calientes, las cervezas, etc… pasando a tu lado. Una cosa que me pareció estupenda es que ellos pasan y te dan un vaso, te sirven la cerveza y se llevan la lata, así se impide que la gente la tire al campo y pueda hacer daño a nadie J Pero bueno, después de unas cuantas cervezas (yo diría que unas 12 entre los dos) y de ver 6 goles, nos fuimos a casa contentos de verdad, aunque reventados después de un largo día y con muchas cosas que hacer por delante.

En la próxima entrega, seguiremos con más aventuras de Rio.

lunes, 11 de febrero de 2008

momentos ñoños

El Tesoro

He encontrado este mapa y no se que indica

¿alguien podría ayudarme?
¿quizas sea un tesoro?
pero si es un tesoro.......... tendria que compartirlo, nunca he tenido nada y no quisiera que alguien me quite lo que el destino me depare

Asi que lo hare solo, solo, como todo en mi vida, no conoci a mis padres, vivieron conmigo durante muchos años pero nunca los senti como mios, ellos tienen la culpa de todo lo que me pasa, ellos..... ellos... ellos......

nunca me dieron animos cuando me vinieron mal dadas, nunca me escucharon cuando los problemas se agolpaban en mi puerta, nunca calmaron mi dolor, solo estuvieron alli, .......... solo estuvieron alli...................

Yo quería que jugaran conmigo,
yo queria que me hablaran de lo que fuera,
que mas daba,
que me vieran como lo que soy, era mi meta....
yo queria............

pero que mas da......
que mas da........

Ahora tengo un mapa que es mio, mio mioooooooooooo y no de ellosssssssssssss,
me oissssssssssssssssssssssssssss

si, si estoy gritandoooooooooooooooooooooooooo

ES MIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Busque durante años y por fin una tarde abril, lo encontre, no estaba enterrado en ningun lugar oscuro, sino que era una vieja casa, el lugar donde me acercaba, abri la puerta............ y alli estaba mi tesoro................... EL ABRAZO DE MIS PADRES

viernes, 8 de febrero de 2008

Momentos ñoños


Me gustaría que pensaras, por un momento, en todas esas veces en que te has acercado a ese lugar, al que yo llamaré nuestro precipicio, que solo conoce nuestro interior, sin forma, sin explicación y en muchos casos sin sentido para el resto de las personas, donde dejaste de pisar suelo firme, para llegar a un punto donde todo era nuevo, donde no sabías que te ibas a encontrar tras ese paso al que algunos llaman vida.

Ante cambios de trabajo, conocer nuevas personas, situaciones inesperadas, ante tantas cosas…….. Llegamos a un punto que nos cuesta atravesar, donde tenemos que emplear en muchos casos nuestra fuerza interior para seguir pasando o………. en muchos casos, para volvernos atrás, sin arriesgarnos ante algo que no sabemos si merece la pena notar esa sensación de vértigo que nos embriaga, ante lo que no podemos controlar y que no depende solo de nosotros, sino de todo lo que nos rodea.

Nos acercamos con cautela, sigilosamente, ante ese límite, manteniendo siempre un pie sobre suelo rocoso, guardando la ropa por si hay que volver rápidamente a lo ya vivido.

A veces lo haremos solos, otras acompañados, todo dependerá de la página que nos toque vivir. Iremos asomando la cabeza, la atracción de lo nuevo nos esta llamando, el magnetismo de lo que creíamos perdido: posición social, el amor, el poder, la amistad, ….; nos provocará un deseo de seguir mirando, intentando ver que hay tras ese velo de oscuridad, sintiendo la necesidad de mejorar nuestro viaje en este mundo de vivos.

Llegará un momento donde nos encontraremos ante una encrucijada. Ya solo estamos sujetos con un suspiro a lo conocido, hemos percibido que podemos ganar con el riesgo, pero todavía no conocemos que podemos perder ……… y seguramente nunca lo sabremos si no lo hacemos. En este punto no vale lo que nos digan de otros que lo hayan hecho o vivido antes, porque cada persona es un mundo y cada situación y cada tiempo lo hacen diferente, y el que tiene que ser el guerrero eres tú mismo.

Si decides desprenderte, dejarte caer, durante un tiempo volarás sin saber si volverás a suelo conocido ni cuando pararás, y quizás nunca sabrás si valió la pena, o quizás hayas dado un paso, que en vez de ser un precipicio haya sido una simple molestia, en tu senda para llegar a tu meta.

No te diré que saltes conmigo o sin mí, solo te diré que a mí si que me valió la pena.

Dedicado a una persona muy especial.

Mis momentos ñoños

En este mundo de guerra, de odios, de venganzas, de desengaños….
Estoy aquí, repudiado de la gente que antes me llamaban amigo, vecino, hermano,……

¿Y sabes cual fue mi delito?
No mate a nadie,
No robe a los pobres,
No torture al vencido,
No renegué de mi familia…

¿Sabes de verdad cual fue mi error?
Creer.
SI. CREER, fue mi fechoría.
Creer en algo que hasta ahora nadie creía,
Creer en que no es la solución las armas,
Creer que con palabras podía derribar montañas,
Creer en el bien que hay en las personas.

¿Y solo fue eso?
Eso, solo eso, fue el error,
Que otros vieron y que nunca reconocí.
Para mi hice lo que debía,
No quería ir a una guerra que no era mía.

Mi familia me repudia,
Mis amigos me llaman cobarde,
Mi pueblo ha borrado todo recuerdo de mí.

¿Y ahora que?
No lo se…….
Sigo escondido, con la única compañía de la fría mañana,
Con el sonido de los pájaros que tantas veces desprecie,
Con una muda que ahora mi mayor tesoro…….
¿O no?

¿Que estoy diciendo?
Mi mayor tesoro sigo siendo yo y ………………… lo que creo.

Camino sin rumbo, ya no tengo destino, mi guía ya no volverá a ser
Llegar a ser el más rico de la aldea,
Ni que todo el mundo hable de mí como el más gallardo caballero,
Ni besar la cruz de un Dios que al repudiar su cruzada, me volvió la espalda,
Ni dejar de pensar para ser como el resto.

Mi cometido será gritar
SIEMPRE HAY OTRA OPCION.

¿Lo compartes conmigo?
Ven

¿No lo crees?
Siéntate y hablemos.

martes, 5 de febrero de 2008

Brasil - Capítulo 1

Introducción

Bueno chicos, ya ha llegado la hora de contaros mi excesivamente corto viaje de 2 semanas a Brasil, tierra de samba, de fútbol, de playas y de garotas impresionantes. En cualquier caso, creo que lo mejor es ir contándoos mi viaje poco a poco mientras voy acompañando el texto de alguna que otra imagen (en este primer borrador todavía no habrá fotos). Y para que os orientéis cuando ponga cifras y precios, la moneda en Brasil es el Real (R$) y el cambio con respecto al € está 1€ - R$2,6.

Capítulo 1 – El viaje y el primer fin de semana en São Paulo

Todo empezó la madrugada de un jueves 17 de enero (bueno, eran las 7 de la mañana, pero para mí eso siempre ha sido madrugada), cuando cogí mi maletón lleno de ropa que no sabía si iba a usar o no y lo metí en el coche…de mi padre, que para algo el buen hombre se ofreció a llevarme al aeropuerto :) El caso es que todo en orden, llegamos bien al aeropuerto, con las 2 horas de antelación de rigor, facturamos y se largó (que el buen hombre tenía cosas que hacer), quedándome yo bien contento con mi asiento 23A, ventanilla y más o menos centradito, aunque con el resquemor de que el vuelo tenía un cierto retraso… En fin, cuando llegó la hora de embarcar, me fui derechito a mi asiento y descubrí que el tan agradecido 23A no era tan buen asiento pues daba la casualidad que era el asiento que quedaba justo delante del baño, lo que se traduce en una imposibilidad parcial de reclinar el asiento (se podía un poco, pero como si no se pudiera…) y en escuchar constantemente la cadena de los demonios.

En fin, después de un tortuoso vuelo de 11 horas en el que vi “El ultimátum de Bourne”, “Diario de una niñera” y, 3 veces, “Ratatouille”, llegamos finalmente a São Paulo. Allí, tras las puertas de la recogida de equipajes, se encontraba Ivi, mi mejor amiga, mi hermanita, mi otrora gran amor convertido ahora en una amistad inquebrantable más allá del tiempo y del espacio (6 años y medio sin vernos separados por la inmensidad del océano Atlántico). Huelga decir que nos fundimos en un abrazo de esos de película, en el que uno y otro salen corriendo hacia el otro con una sonrisa que da la vuelta a la cabeza en la cara, en el que arrollas cualquier cosa/persona que se encuentre en el camino y en el que el tiempo parece detenerse mientras quedas en los brazos de esa persona. Un abrazo que pudo durar apenas unos segundos para el resto de las personas allí presentes, pero que fue una eternidad para ambos. Además, la pobrecita no sabía que el vuelo tenía retraso y, como en São Paulo el tráfico es ligerito, había ido con tiempo de sobra por si acaso, por lo que tuvo que esperar en el aeropuerto de Guarulhos (el que está ubicado en las afueras, en el Nordeste) cerca de 4 horas.

Luego, nos pusimos rumbo a su casa, que queda en el barrio de Saúde, en el Sur de São Paulo. Cerca de una hora de trayecto en coche, un Fiat Uno 1.0 (el allí llamado coche popular por ser el más barato costando unos R$ 18.000) que más básico no podía ser pues, por no tener, no tenía ni reloj ni tacómetro, para llegar hasta allí, aunque dada la hora (aproximadamente las 9 de la noche hora paulista) aprovechamos para hacer una parada en un “restaurante” (así se llamaba, pero era más tasca italiana que otra cosa) que nos indicó su madre, que en ese momento estaba regresando a casa también, y cenar algo con ella. Después de ponernos un poco al día e intercambiar algunos recuerdos, fuimos a la casa, donde se encontraba Moana, su hermanita pequeña (20 añitos la condenada). Estuvimos varias horas hablando y contándonos cosas, tanto unos como otros, hasta que finalmente mi cuerpo desistió y me fui a la cama. (en la fotode derecha a izquierda: Moana, Ivi y yo)

Al día siguiente (viernes 18), Ivi tenía que trabajar, por lo que yo me quedé durmiendo y viendo la tele hasta que llegó con la comida, a eso de las 3. Comimos y nos fuimos a conocer a sus amigas: Idalina y Ju Muçarela (en realidad es Mezzalira, pero como es blanquita y es un apellido difícil, le llaman como al queso), que eran las que estaban en la “casa de las meninas”, así llamada porque es una casa donde viven 4 estudiantes (chicas todas ellas) en la zona de las universidades (a ese tipo de casas se les llama “Repúblicas” allí). (en la foto, en el sentido de las agujas del reloj y empezando desde las 12, Ivi, yo, Idalina y Ju Muçarela).

Estuvimos un rato con ellas en su casa y nos fuimos a las Rosas de Ouro (http://www.sociedaderosasdeouro.com), que es una escuela de samba muy famosa en la ciudad, aunque algo apartada del centro y de acceso un tanto complicado; o eso, o que Ivi no sabía manejarse muy bien por esa zona, porque dimos varias vueltas (incluidos sendos giros en U que nos dejaban en el mismo punto de partida xD) y llegamos al sitio de pura casualidad siguiendo a otro coche que “tenía pinta de ir allí”. Aparcamos frente a una casita que nos indicó una señora que, aparentemente, vivía ahí y vigilaba el coche para que no lo robaran, y nos fuimos a coger las entradas (R$15 por persona) para ver (y participar) en el ensayo de la escuela. Después, como quedaba tiempo para que empezara, nos fuimos a unos puestecitos que había en la calle de cosas variadas: comidas rápidas varias, bebidas, etc. Yo me tomé una “calabresa com pão” (choripan para los entendidos) y fuimos a coger unas rubias (aquí fue donde comenzó mi romance con ellas), dando lugar a una de las mejores anécdotas del viaje. Resulta que vamos a comprar unas cervecitas y bueno, casi que mejor reproduzco la conversación entre Ivi y el chico:
- ¿A cuánto están las latas?
- Una por R$3, dos por R$5 y tres por R$10. (Curiosa cuenta…)
- ¿Y no me puedes dejar 4 por R$10?
- No, por R$10 te puedo dar 3.
- Pero si te compro dos por R$5 y luego otras dos por R$5, sería como comprarte 4 por R$10, ¿no?
- Eso será en tu matemática, en la mía no.

Flipante lo de este tío y claro, otro que había al lado y que escuchó la conversación nos insistía en que él sí que nos daba 4 por R$10, pero como Ivi se había obstinado ante la respuesta del primer individuo, dijo que ya no quería cerveza. En cualquier caso, os vais haciendo a la idea del precio tan caro que tienen las cervezas allí (y esto era a la puerta de un sitio en el que todo el mundo quería beber y los vendedores estaban aprovechándose de ello). En fin, que una vez nos recuperamos del shock, entramos en el local y bueno, no hay fotos de las mozas porque no había manera de sacarlas de tan lleno que estaba (apenas pude sacar algunas con las chicas), pero si vierais como movían las caderas y las cinturas esas tías, sólo de imaginar lo que podrían hacer se os descoyuntaba la vuestra…y encima estaban de toma pan y moja las muy condenadas. Vamos, que no sé cómo lo hacen los brasileños para pensar en otra cosa que no sea esa… (digo yo que estarán acostumbrados y no les parecerá raro, pobrecitos ellos…) Pero bueno, lo que es la samba está genial, es súper divertido de bailar (nada que ver con las estrecheces de bailes españoles como el flamenco o el chotis…) y la música es buena también, una batucada como Dios manda no tiene precio. Después de un rato en el que Ju estuvo enseñándome un poco cómo se baila eso de la samba y de descubrir que no se me deba tan mal (incluso menos mal que a alguno de los brasileños allí presentes), Ivi e Idalina se fueron al baño y, como os imaginaréis, fue casi imposible volver a encontrarnos, por lo que Ju y yo decidimos meternos en el grupo de la samba. Resulta que allí, en los ensayos, la batería baja donde está todo el mundo y comienza a dar vueltas en un recorrido cuadrangular, siendo seguida por las dos personas que marcan el baile a la gente, las cuales son seguidas por el resto del populacho…populacho entre el que nos encontrábamos Ju y yo en un alarde de ritmo y coordinación en el que no desentonaba más que los que tenía a mi lado. Finalmente, tras dar como 4 ó 5 vueltas al local, nos encontramos con Ivi e Idalina, dando la noche por cerrada por estar muertos de calor, de cansancio, de sudor, de pies doloridos y, sobre todo, sin blanca para seguir comprando cerveza.

El sábado 19 por la mañana, Ivi, Moana y yo fuimos al supermercado a hacer la compra para el churrasco con el que celebró Ivi su cumpleaños. En total, unos 20kg de carne variada (salchichas, chorizos, filetes de ternera, costillas, cuartos traseros y corazones de pollo, etc.) y algo de ensalada, además de 24 latas de cerveza. Es tradición que cada quien lleve algo de comer y algo de beber, pero como no podíamos saber a qué hora iba a comenzar a llegar la gente, decidimos que nosotros poníamos la comida y un poquito de bebida y que el resto del mundo trajera exclusivamente bebida. En fin, como a eso de las 2 de la tarde nos pusimos a preparar cositas en la “sala de churrascos” que tienen en el edificio de Ivi, que es como las salas de fiestas de los edificios tradicionales de aquí, pero con una cocina con barbacoa incluida, con sus fogones, su nevera y su congelador disponibles (impresionantemente bien montado que está todo) y, ¡hasta una televisión con cable y radiocasete! En cualquier caso, estábamos Ju, Ida, Ivi, Moana y yo preparando ensaladas, salsas y demás cosas mientras poníamos las primeras carnes y nos bebíamos las primeras cervezas, así un buen rato hasta que empezó a llegar la gente alrededor de las 5 de la tarde. Primero llegó Marcelo (el novio de Moana) con su hermano, un par de judíos brasileños que se fueron hace cosa de 12 años de mochileros por Europa sin casi dinero (incluso conocieron “Las Cuevas” en Madrid y se acordaban de ello) y terminaron siendo expulsados de Suecia por excederse en el tiempo de su estancia permitida y no tener dinero para volver, razón por la que nunca podrán volver ahí al ser repatriados forzosamente. Después llegaron algunos amigos y amigas de Ivi de su época colegial (con los que apenas crucé un saludo y se fueron a un rinconcito a fumar de la cachimba). Después llegaron más amigos de Ivi de la universidad, Diogo y Vanessa, Dennis y Rebecca (curioso, Dennis es el ex de Ivi y Rebecca una de sus mejores amigas), Rubens (que no es el novio de Ivi, si no el chico con el que queda frecuentemente para liarse y con el que habla unas 3 veces al día por teléfono), Ju Arouca (otra Ju más), Amanda (una amiga de la infancia de Ivi que lleva unos 7 años viviendo en Australia) y alguna que otra persona que ahora mismo no recuerdo, entre otras porque para cuando fueron llegando los últimos ya tenía un lío de nombres de proporciones considerables en mi cabeza y unos centilitros de sangre recorriendo mi cerveza…En cualquier caso, desde las 2 de la tarde hasta las 2 de la mañana, lo que hubo fue mucha cerveza, mucha carne, muchas caipirinhas (de fresa, de kiwi, de limón, de melón, etc.), mucha música, mucha charla, mucho bailoteo y muchas coñas…entre medias, mi primera gran ocasión de mojar tirada por el retrete.

Era ya bastante tarde, cerca de las 10 de la noche. Estaba sentado al lado de Amanda, Marcelo, Diogo y Dennis. Los chicos estaban tocando forrõ (“for all”, un tipo de música para todos los públicos xD) con una guitarra, una pandereta y una flauta travesera mientras Ivi, Moana y más gente bailaban al ritmo que ellos marcaban. Mientras tanto, Amanda, que llevaba un pedal del 15, empezó a hablarme, pero yo no le entendía apenas (entre SU pedal, MI pedal, la música al lado y que apenas llevaba 2 días aclimatando el oído) y le pedía que si me podía repetir lo que decía, pero cuando le miré la cara y vi la sonrisa que tenía, que me cogía la mano y todo eso, fue cuando me di cuenta del tema…Entonces empecé a decirle que porqué no me lo decía más cerca, que si ella me enseñaba yo entendería y chorradas así acercándome cada vez más a ella…¡hasta que le dio por levantarse e ir a hablar con Ivi! En fin, que ahí se me cayó el alma a los pies. Al poco, ella se fue a dormir porque todo le daba vueltas (muy borracha tenía que ir para haberme tirado los trastos así) y la gente también fue diluyéndose hasta que quedamos solamente Ivi, Moana, Marcelo, Diogo, Vanessa, Ju Arouca, Ju Muçarela, Idalina y yo en pie, recogiendo todo como machotes a las 2 de la mañana.

Cuando ya estaba todo recogido y subimos al piso de Ivi, nos encontramos con que Diogo dormía en una cama, Amanda en otra, la madre de Ivi en un colchón en el suelo del salón (lo suele hacer porque es el único lugar de la casa donde hay tele, no os alarméis) e Ivi estaba que se caía de borracha, pero tanto las dos Ju como Idalina y yo andábamos con ganas de fiesta, por lo que, tal y como estábamos, nos fuimos a una discoteca del centro de São Paulo llamada “Armazem da Vila”, lugar de la mejor anécdota del viaje. Cuando llegamos a un aparcamiento cercano, los vigilantes del mismo se percataron de que yo iba vestido con bermudas (por debajo de la rodilla, pero bermudas al fin y al cabo) y nos avisaron de que no nos dejarían entrar, pero amparadas en el hecho de que yo era europeo mis nuevas amigas creyeron que no habría problema alguno. El caso es que llegamos al sitio y nos disponemos a entrar cuando los de la puerta empiezan a decir que así no me podían dejar pasar, que les daba igual que fuera europeo, que fuera verano y demás pamplinas. Después de mucho insistirles las chicas, no dieron su brazo a torcer, por lo que decidimos que, a grandes males, grandes remedios. Dicho y hecho, a 3 metros de la puerta y en medio de la calle, si hubierais estado por ahí esa madrugada del 19 al 20 de enero, habríais visto a un tío (yo) y una tía (Ju Arouca) quedarse en ropa interior y cambiarse mutuamente los pantalones, poniéndose, él unos pantalones vaqueros de tía híper ajustados (y teniendo la tía en cuestión una talla 36 como mucho) que le quedaban por encima del tobillo y que debía llevar abiertos para que el tiro no quedara por las rodillas y ella unos bermudas cargo (que eran de una talla 40) en los que entraban 2 como ella de cintura y que casi le llegaban a los tobillos (recordemos que eran bermudas xD).

En fin, un cuadro único y digno de recordar, pero que sirvió para continuar la fiesta pues nos dejaron entrar sin más problema que el de tener a un gorila rondándonos el resto de la velada bajo la amenaza de que si nos cambiábamos dentro, nos echaban del local. Pero bueno, a todo esto se le unió otro tinte de gracia y es que a la vez que entrábamos nosotros, entraban también tres chicos locales y jovencitos (apenas rondaban los 19 añitos) y claro, alucinaban en technicolor y se pusieron a hablar con nosotros, mucho más interesados en mi y en lo loco que estaba el español poniéndose unos vaqueros de tía que en lo buenas que estaban mis amigas. Pero bueno, dentro nos esperaba el exnovio de Ju Arouca, un tío medio simpático aunque algo pesado y reacio a las indirectas y a las directas que Ju le mandaba. De todas maneras, entre los 3 chavales y el pesado, nos salieron gratis TODAS las copas y no fueron pocas. Los primeros porque seguían en estado de shock y me ofrecían caipirinha tras caipirinha (aunque en este local sólo le ponían cachaça, sin frutas ni nada, y azúcar, por lo que no era gran cosa), y el segundo porque le invitaba a copas a Ju, copas que ella, muy amablemente, hacía circular entre nosotros. Y mientras tanto, yo estaba pendiente de la otra Ju (Muçarela) mientras que la que estaba pendiente de mi era Idalina. Y lo peor es que yo me daba cuenta, pero con quien quería liarme era con Ju y, gilipollas de mi, pensaba que si le abría la puerta a una, se la cerraba a la otra…En fin, que segunda ocasión de la noche desperdiciada y yo, con un culito impresionante que me hacía el vaquero femenino (muchas miradas se centraron en mí y no eran sólo de incredulidad, alguna de lujuria también había ^^), me quedaba compuesto y sin acción. Y es que, para estas cosas, tiene que haber un manual. ¡Coño!

En cualquier caso, la historia no termina aquí pues, cuando volvíamos a casa de Ivi, Ju Arouca vio una casa que tenía una especie de pórticos con globos y le pareció que sería una idea genial llevarle a Ivi alguno para celebrar su cumpleaños (que era el día 20), por lo que dio un frenazo en seco, echó marcha atrás en medio de un cruce y giró para que paráramos a coger el pórtico de globos. Vosotros imaginaos 4 personas en un Corsa intentando meter una ristra de globos de 3 metros de largo y emprender la marcha nuevamente...Obviamente, no pudo ser, tuvimos que conformarnos con una ristra de sólo 1 metro. Cuando llegamos a casa de Ivi nos encontramos con que tan solo quedaba una cama libre, aunque por lo menos era matrimonial, así que decidimos dormir los 4 en la misma cama puestos de forma que 2 durmieran con la cabeza en el cabecero y los otros dos en sentido inverso, además de intercalados, quedando con un mínimo de comodidad.

Al día siguiente y tras contar las historias de la noche anterior a todos los presentes y dejarles boquiabiertos y atónitos, nos fuimos a casa de las meninas a continuar con el churrasco del día anterior, pues había sobrado comida y bebida (aunque de esto mucho menos, apenas unas 24 latas de cerveza). Una vez allí, pocas cosas que contar. Más cerveza, más comida y muchas partidas de cartas (Truco concretamente, aunque intenté enseñarles a jugar al mus xD). (en la foto, de izquierda a derecha, Vanessa, Ju Muçarela, Ivi, Moana y yo).

Y con esto finaliza el relato de mi primer fin de semana en São Paulo. Puede que suba alguna otra foto más adelante, pero no contéis con ello.

domingo, 27 de enero de 2008

Comenzamos la andadura

¡Bienvenidos viciosos y viciosas!


Mi trabajo aquí ha concluido :P